jueves, 10 de julio de 2014

LAS COSAS DE SIEMPRE

Hace muchos días que no escribo, la cosa esta es que estoy de vacaciones, en mi querido camping, que la verdad es un lujo, porque si te aburres aquí es porque quieres o eres tonto, porque no tienes tiempo de hacer todo lo que esto te ofrece.
Yo este año me he llevado un pequeño chasco, pues resulta que muy a mi pesar, no puedo hacer la mitad de las cosas que hacia el año pasado.
Mi cuerpo se ha propuesto hacerme la vida imposible, y si hago algo que a el no le parece, luego me lo hace pagar con dolores.
(Y luego hablan del libre albedrio)
De todas maneras, aunque mi deterioro es evidente todavía puedo hacer cosas, pero es inevitable que me de rabia con lo que yo he sido.
A parte de todo estas son las vacaciones de la espera...
Si la espera de mi nieta DANIELA; que me da (como no, quebraderos de cabeza), ya sabéis las incertidumbres, que me matan.
Quiero y deseo que todo salga bien, pero un parto es un parto, y hay que tenerle mucho respeto.
Mi hija tiene que dar la talla en cuanto al dolor, y como nunca ha tenido grandes dolores, y los del parto son muy muy fuertes (también eso me da penita) por ella, en fin que como tampoco se lo que ella espera de mi, tampoco se si voy a dar la talla. Eso es lo peor, no saber lo que tienes que hacer para ayudar. y para que ella este feliz.
Todas estas preocupaciones me están por un lado jorobando bastante, pero bueno cuando llegue a casa el 23 de julio creo me aclarare mejor.
El camping esta bien, con gente pero no lleno, incluso ya nos son conocidas muchas caras,

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