Empezaré diciendo que no quiero ofender a nadie, que es mi opinión simple y llanamente, y que si la inmensa mayoría piensa otra cosa, sus razones tendrán.
Y dicho esto, diré lo primero, que no entiendo como le llaman el día de los santos, cuando, todos los que ya no están con nosotros visibles, (osea, que no los vemos) no son nada santos, unos son mejores y otros son peores, y los ha habido hasta muy malvados.
La tradición manda que mañana día 1 hay que ir al cementerio a poner flores en las tumbas y a rezar un poco delante de la tumba.
Yo cuando era pequeña como perdí a mi querida madre ,mi padre nos llevaba todos los años al cementerio, sin perder uno, lo recuerdo, como algo triste, hacia un frió del carajo, casi siempre nevaba o casi nevaba. El cementerio de la ALMUDENA que era donde íbamos, estaba en aquel entonces en medio de la nada, tardábamos mucho en llegar, los autobuses iban a tope (como sardinas en lata) y aquello en mi forma de ver, no servía para nada; si servía para que mi padre mis hermanas y yo, volviéramos a casa, helados tristisimos y muy cansados.
Como eso duró varios años, mi recuerdo sigue intacto y desde entonces, el ir al cementerio lo veo una gran perdida de tiempo dinero y darle bola a la gran tristeza con la que te vas.
Y lo llevar flores es mas que absurdo, yo creo que cuando te das la vuelta, al que le parezca, coge tus flores y se las pone a su difunto; flores que por cierto las pagas a precio de oro, por ser el día señalado.
Además como se pone el cementerio hasta arriba al día siguiente ni un alma hasta el año que viene. La gente dice que va porque les consuela, los que se han ido desde luego en la tumba no están, allí solo hay unos cuantos restos que desde luego ni se inmutan, por que vayas o no vayas y menos aun por poner flores.
Los que se han ido su alma esta en el otro lado, muchas veces lo he dicho en este blog y ellos nos ayudan cuando lo necesitamos y hablan con nosotros a través de nuestra mente.
Yo a mis tres almas principales los tengo siempre conmigo y estoy segura, que a veces les tengo a mi lado en mi sofá, puede parecer de locos, pero es lo que yo siento y vivo todos los días.
Esta sociedad esta llena de cosas que no tienen sentido, aunque parezca increíble, todavía se vive mucho por el que dirán.
Mucha gente va al cementerio para que no le critiquen.
Las cosas que hacemos por los demás hay que hacerlas en vida, cuanta gente mayor, se pasa los últimos años de su vida, mas sola que la una y mas triste que triste y cuando muere esos familiares no faltan un 1 de noviembre, con el ramo mas grande y mas caro que encuentran.¿A quien engañan? engañar a los demás es fácil ¿pero conseguiran engañarse a uno mismo?.
Las tradiciones están bien, a veces, pero otras son un sin sentido.
Conclusión: amemos a nuestros familiares en vida, una vez se van, los tenemos en el corazón, se dice y se comenta que mientras haya una sola persona que te recuerde uno no esta muerto. Y yo desde luego eso lo cumplo con creces.
No hay comentarios:
Publicar un comentario